miércoles, 6 de julio de 2011

México


México

Llegamos a Cancún el día 23 de mayo, y lo hicimos muy cansados ya que fue un viaje muy largo hasta llegar aquí. Primero tuvimos un vuelo de casi 9 horas de Rarotonga a Los Angeles, donde tuvimos que esperar 20 horas en el aeropuerto hasta nuestro siguiente vuelo. Volamos a la mañana siguiente a Cancún vía Denver. Y a todo eso hay que añadir el cambio de uso horario. Fueron 2 días muy largos y llegamos muertos.

El primer día no hicimos mucho, nos quedamos en un hostal en Playa del Carmen durante los 9 días que estuvimos en México. El hostal estaba muy bien, pero estaba en una zona de fiesta y había bares y pubs a ambos lados del hostal con música a todo volumen durante toda la noche, incluso el hostal tenía un bar en la azotea. No era el mejor sitio para dormir pero había muy buen ambiente.

El segundo día recorrimos un poco la ciudad, aunque no hicimos mucho. También fuimos a una agencia de excursiones, ya que habíamos reservado el tour de nado con tiburón-ballena por Internet. Teníamos muchas ganas de hacerlo y tuvimos mucha suerte, ya que estos tours sólo se hacen durante 3 meses al año, desde principios de junio hasta septiembre. Pero este año la temporada empezó un poco antes y pudimos hacerlo. Era el día del cumple de Susi, nos despertamos muy temprano y nos recogieron delante del hostal. Nos llevaron hasta Cancún donde cogimos un barco. Éramos 8 personas en el barco, en parejas de 2, ya que sólo se permite a 2 personas en el agua al mismo tiempo con un instructor. Antes de salir nos dieron una charla y nos explicaron lo que teníamos que hacer. Estábamos con muchas ganas de empezar ya. Cuando llegamos a la zona donde íbamos a nadar enseguida empezamos a ver tiburones-ballena por todas partes, eran enormes, también había muchas mantas-raya, eran gigantes. Era alucinante, estábamos flipando. Nos tocaba en segundo lugar para entrar en el agua, y cuando lo hicimos la sensación fue indescriptible. Nada mas entrar miras abajo y ves a un pez enorme, de mas de 10 metros viniendo hacia ti, impresiona mucho. Nos pusimos a su lado y empezamos a nadar, nadan bastante rápido aunque se puede seguir su ritmo durante un tiempo. Nos tiramos unas 3 o 4 veces mas, y cada vez era mejor que la anterior, ya que sabíamos cuando empezar a nadar para no perderlo, y lo seguimos durante un buen rato. Incluso una de las veces nos pasó una manta-raya por debajo, ¡alucinante! Después pasamos al lado de una isla donde vimos cientos de tortugas desde el barco nadando a nuestro lado. También paramos para hacer snorkling en un arrecife de coral, que es parte del segundo arrecife de coral mas grande del mundo, después de la Great Barrier Reef en Australia. Fue un día perfecto y el mejor regalo de cumpleaños que Susi podía desear.

Mientras estuvimos en el hostal conocimos a Matthias, un chico suizo que fue muy amable con nosotros, vino con nosotros por Playa del Carmen y nos enseñó buenos sitios donde comer y comprar. Lo pasamos bien con el.

Al día siguiente fuimos a Sian Ka’an, que es una reserva de la biosfera. Fue un camino muy largo, tardamos mas de 3 horas en llegar y la mayor parte fue por un camino de tierra. Una vez allí hicimos un tour en barco, vimos tortugas marinas y nos metimos por los manglares. También pasamos por una isla donde anidan miles de pájaros y al final paramos en una piscina natural que era increíble con aguas cristalinas y fondo de arena blanca. Aunque el día estuvo bien Sian Ka’an no nos pareció tan impresionante y esperábamos algo mas del lugar. Al volver estábamos muy cansados, pero decidimos ir ese día al Coco Bongo ya que no teníamos muchos días aquí. El Coco Bongo es una discoteca muy famosa donde se hacen shows también. Está muy bien, con la entrada tienes barra libre y hay shows buenísimos durante toda la noche. A veces hay alguna pausa y la gente puede bailar hasta que empieza el siguiente show. Fue una buena noche.

Al día siguiente dormimos hasta tarde y no hicimos mucho, por la noche dimos una vuelta por la quinta avenida, que es la calle mas famosa de la ciudad y hay muy buen ambiente a todas horas.

El día 28 hicimos un tour donde primero fuimos a Tulum, que son unas ruinas mayas que están al lado de la playa. Es muy bonito hay muchas ruinas con vistas a la playa que esta considerada una de las mas bonitas del mundo. Hacía mucho calor, como casi todos los días que estuvimos aquí y mucha humedad. Después nos fuimos a Xel-ha, que es un parque natural donde se pueden hacer varias actividades, pero la principal es el snorkling. El parque es muy bonito y tienes vistas increíbles. También nos vino bien estar en el agua por el calor que hacía. Pero el snorkling no era muy bueno, el agua no tenía buena visibilidad y no había muchos peces ahí.

Al día siguiente fuimos a ver las ruinas mayas mas famosas de México, que son Chitchen Itza. Es una de las 7 maravillas del mundo, y era la tercera que íbamos a ver en nuestro viaje, después de la Gran Muralla China y el Taj Mahal. El viaje también fue largo, de mas de 3 horas, pero valió la pena. Cuando llegamos también hacía muchísimo calor y estuvimos un rato caminando. Ver la pirámide principal es alucinante, es enorme y además está perfectamente alineada, marcando con sombras los solsticios de verano e invierno, además de muchas mas curiosidades. Pasamos unas horas aquí con nuestro guía, que nos iba explicando todo sobre la historia de los mayas y de las ruinas. Muchas de las predicciones del fin del mundo en 2012 están basadas en el calendario maya, y aquí se habla bastante sobre el tema. Aunque yo no creo en estas predicciones, es muy interesante escuchar sobre el calendario maya, que en realidad nos dijeron que habla de un nuevo comienzo para el 2012, y no del fin de nada, por lo que todo ha sido malinterpretado. Después de terminar en las ruinas y de comer en un buffet donde todo estaba buenísimo, fuimos a un cenote, que son unas cuevas que hay por toda la península del Yucatán y que están llenas de agua. Fuimos a un cenote increíble donde tuvimos un rato para bañarnos, nos vino muy bien para refrescarnos. Antes de volver pasamos por Valladolid, una ciudad colonial bonita e interesante.

El día 30 no hicimos nada, teníamos pensado hacer una excursión a Ría Lagartos, donde se pueden ver flamencos, pero el tour se había cancelado porque no había suficiente gente para ir. La verdad es que nos vino bien y aprovechamos ese día para descansar.

En nuestro último día en México fuimos a Isla Mujeres, donde nadamos con delfines. Fue una experiencia única. Tuvimos cerca de 1 hora en el agua con ellos, donde jugamos y nadamos con ellos. Son muy inteligentes y están entrenados para hacer muchos trucos e interactuar con la gente. Después pasamos el día en la isla, donde también fuimos a un resort donde teníamos la entrada incluida con el tour. Había una zona de snorkling pero no era muy buena, pero creo que después del snorkling de las Cook Islands ya nada puede ser mejor J. Por la noche quedamos con una pareja de alemanes que conocimos durante el tour a Chitchen Itza y dimos una vuelta juntos por Playa del Carmen. Caminamos por la quinta avenida, a nosotros nos encantó el ambiente que había ahí.


En definitiva México nos encantó, el país es precioso y enorme, hay muchísimo que ver y hacer, y la gente es muy amable. La verdad que queremos volver algún día y descubrir mas de este increíble país. Y además el nado con tiburón-ballena fue una de las mejores experiencias que tuvimos en todo nuestro viaje. Fueron 9 días inolvidables.




Cook Islands

Cook Islands

Rarotonga y Aitutaki 
 

El día 3 de mayo volamos de Auckland a Rarotonga, y como durante el vuelo cruzamos la “international date line” llegamos a las Cook Islands un día antes del que salimos, el día 2 por la noche, y volvimos a repetir el día 3 de mayo, fue muy curioso.

Desde el momento que llegamos tuvimos buenas sensaciones del lugar, nos recibieron en el aeropuerto con música típica del lugar con ukelele. Además a mucha gente la recibieron con collares de flores, a nosotros no nos dieron ninguno ya que nosotros no íbamos a un resort de lujo. Ahí nos estaba esperando Bill, que es el dueño del backpackers donde nos íbamos a quedar.

Nuestra primera intención era la de pasar solo 1 semana aquí, pero cuando cambiamos los vuelos no había disponibilidad de vuelos para cuando nosotros queríamos, ya que nuestro siguiente vuelo a Los Angeles solo sale una vez a la semana. Al final pasamos 20 días aquí, al principio pensábamos que iba a ser demasiado.

Los primeros días no hicimos mucho, solo descansamos, durante estos días no tuvimos el mejor tiempo, estaba siempre nublado y llovía a veces. Aprovechamos para ir al mercado, donde hubo un show con baile y música tradicional de las islas que nos gustó mucho, y también fuimos a ver un poco la isla. Rarotonga es la isla principal, pero es muy pequeña, es redonda y toda su costa solo son 32 kilómetros, sólo hay 2 autobuses, uno va en sentido de las agujas del reloj y el otro al contrario. La isla está llena de gallinas, que están sueltas y las ves por todas partes, también hay muchos perros salvajes, aunque son muy tranquilos, igual que la gente de aquí. Hay palmeras de cocos por todas partes y siempre teníamos coco y bananas frescas para comer, también nos abrimos nuestro propio coco, que no es tan fácil como parece. Toda la isla esta rodeada por una laguna hecha por coral y es precioso, dentro de la laguna el mar siempre está en calma, por muchas olas que haya afuera. Hicimos mucho snorkling aquí, y es el mejor que hemos hecho en todo el viaje, las aguas son cristalinas y está lleno de vida, peces tropicales de todos los colores, estrellas de mar, pulpos, morenas, etc. Además en toda la laguna hay como mucho 2 metros de fondo y casi siempre se puede hacer pié. También fuimos a correr un par de veces durante los primeros días, ya que queríamos hacer algo de deporte, aunque nos prometimos que íbamos a correr todos los días al final no lo cumplimos J.

Durante el tiempo que nos quedamos en el backpackers conocimos a muy buena gente e hicimos muy buenos amigos. Lo pasamos muy bien juntos. Fuimos casi todos los días a la playa, casi siempre íbamos a una donde había el mejor snorkling de la isla, y estaba muy cerca de nuestro backpackers. Un día fuimos con dos amigas, Lisa y Kelly caminando hasta el pueblo, pensábamos que no se tardaba tanto, y estuvimos unas 3 horas caminando, además estuvo lloviendo durante todo el tiempo, cuando llovió fuerte tuvimos que parar y pasamos un rato en un bar hasta que paró un poco, fue divertido. También hicimos una caminata todos juntos, es un camino que dura unas 4 horas y que cruza toda la isla por el centro subiendo por las montañas. Fue increíble, había unas vistas alucinantes y al final del camino hay una catarata donde nos bañamos, lo pasamos genial.

También celebramos nuestro aniversario en Rarotonga, cumplimos 3 años juntos J .
Esa noche fuimos a cenar a un resort donde además hacían un show tradicional, con baile, fuego y percusión. Fue muy bonito.

Antes de llegar a las islas estuvimos pensando que hacer ahí durante tanto tiempo, vimos que había un vuelo de Rarotonga a Tahití, pero era demasiado caro y al final no fuimos, pero decidimos ir a Aitutaki, que es otra de las Cook Islands. Fue un vuelo de 1 hora y nos quedamos durante 4 días. La isla es un paraíso, está considerada como una de las lagunas mas bonitas del mundo, y lo es, sencillamente preciosa. Aquí nos quedamos en un bungalow en la playa, a pocos metros del mar. Era perfecto, teníamos una cama con mosquitera, una pequeña cocina y la ducha estaba fuera. Un día dimos la vuelta a la isla en bici, sólo tardamos unas 3 horas, la isla es aún mas pequeña que Rarotonga. Otro día subimos a una colina, la mas alta de la isla, que sólo mide 124 metros, pero las vistas eran increíbles desde ahí, se podía ver toda la isla desde arriba.

También hicimos snorkling aquí todos los días, y aunque la isla es mucho mas bonita, el snorkling es mejor en Rarotonga, pero también lo disfrutamos mucho. Un día hicimos un tour en barco con Matthias, que era el dueño de los bungalows donde nos estábamos quedando. En Aitutaki hay muchas islas pequeñas alrededor de la laguna, y visitamos algunas, fue increíble, era una isla para nosotros solos en el paraíso. Hicimos snorkling durante todo el día, vimos tortugas marinas y almejas gigantes, además de miles de peces tropicales. Almorzamos en una isla pequeña donde sólo estábamos nosotros, fue increíble. También conocimos gente aquí e hicimos una hoguera por la noche, lo pasamos bien. Aitutaki fue un sueño, tomamos una buena decisión, nos hubiéramos arrepentido mucho si no hubiéramos ido.

Después de 4 días volvimos a Rarotonga, donde nos quedaban 3 días mas. Era como volver a casa, ya que toda la gente que habíamos conocido seguía ahí. Nos alegramos mucho de volver y encontrarnos a nuestros amigos de nuevo. Un día fuimos todos juntos de fiesta al pueblo, lo pasamos genial. Durante nuestros últimos días no hicimos mucho, fuimos a la playa y descansamos. También vimos una boda en la playa a la que íbamos siempre, es un lugar muy bonito para celebrar una boda.

Las Cook Islands nos encantaron, son un paraíso, la gente es muy amable y muy tranquila. La vida es muy relajada aquí. La mentalidad de la gente es muy positiva y viven de forma muy sencilla. Aquí están los mejores sitios para hacer snorkling que hemos visto nunca y las playas son impresionantes con aguas cristalinas y arena blanca.
Es un sueño haber estado aquí, es un paraíso en medio del pacífico lejos de todas partes, aislado del resto del mundo, tan diferente de la vida moderna y ajetreada que tenemos nosotros. Estar aquí es como desconectar de todo, ni siquiera teníamos cobertura en el móvil e Internet es lento y limitado, y nos encantó. Además las islas quieren convertirse en autosuficientes y usar sólo energías renovables y están a poco de conseguirlo. Al principio pensamos que 20 días iban a ser demasiados aquí, porque sólo queríamos quedarnos 1 semana, pero al final incluso nos parecieron pocos y lo disfrutamos muchísimo.




New Zealand - South Island


New Zealand - South Island

El día 1 de marzo cogimos el ferry desde Wellington hacia la isla sur. El viaje duró unas 3 horas y fue muy bonito, el ferry entra a la isla sur por fiordos y va navegando muy despacio, las vistas son increíbles. Melanie, la mujer inglesa que viajo con nosotros por la isla norte vino con nosotros, y también viajamos juntos por la isla sur.

El ferry llegó a Picton, y de ahí nos pusimos de camino a Nelson, nos quedamos a dormir a unos 50 Km. de Nelson en una rest area al lado de un río. Habíamos escuchado que venia mal tiempo y mucha lluvia. Estuvo lloviendo toda la noche y hacía mucho viento, por la mañana muy temprano Melanie nos despertó, ya que su caseta estaba inundada, el río se había desbordado. Tuvimos suerte de que nos despertara, porque si hubiéramos esperado mas tiempo no podríamos haber sacada la furgo de ahí. Ese día llegamos a Nelson, nos quedamos esa noche en un holiday park, donde pudimos secar todas nuestras cosas. En Nelson fuimos a una escuela de inglés a preguntar por los cursos, ya que queríamos hacer uno, la escuela nos gustó mucho y la ciudad también, pero primero queríamos recorrer la isla sur y después volver para hacer el curso, ya que el verano había terminado y queríamos aprovechar antes de que empezara a hacer mas frío.

Melanie se quedó unos días en Nelson con una amiga que tenia ahí, y nosotros seguimos nuestro camino. Primero fuimos a Abel Tasman, un parque nacional en la costa norte. Hicimos un tour en barco con el que recorrimos la costa, que es preciosa, vimos muchas focas por el camino. El barco nos dejó en una playa y volvimos a pie recorriendo la costa. Fue muy bonito, pasamos por playas y bosque, hacia muy buen día y lo disfrutamos mucho.

De ahí empezamos a bajar por la costa oeste, fuimos a Westport, cerca de ahí paramos a ver una colonia de focas, también vimos unos pájaros muy graciosos que son muy parecidos a los kiwis, y muchos turistas los confunden con ellos. Seguimos bajando la costa, el tramo entre Westport y Greymouth es increíble, lleno de acantilados y vistas preciosas. Paramos en las pancake rocks, unas formaciones rocosas que como su nombre indica parecen muchas tortitas una encima de otra, muy curioso y bonito. Melanie nos llamó y nos preguntó si podía alcanzarnos y seguir el viaje con nosotros, quedamos en Greymouth y la recogimos ahí.

De Greymouth fuimos a Arthur’s Pass, que es un pasaje que cruza la isla de costa a costa, la carretera tiene mucha pendiente y en algunos tramos se nos hizo difícil subir con Pinkyboy, pero pudimos llegar arriba. Arthur’s Pass también es el pueblo a mayor altitud de Nueva Zelanda. Pasamos la noche ahí, e hicimos una caminata por las montañas. Al día siguiente seguimos nuestro camino, pero no cruzamos a la otra costa, volvimos por el mismo lado por el que vinimos y seguimos recorriendo la costa oeste.

Nuestra siguiente parada fueron los glaciares, primero llegamos a Franz Josef, donde queríamos hacer skydiving, llegamos por la mañana y fuimos al centro de información a preguntar, teníamos pensado hacer el salto al día siguiente, pero nos dijeron que había sitio para hacerlo ese mismo día, lo reservamos y en menos de 1 hora ya estábamos de camino al avión. Estábamos muy nerviosos, éramos 2 grupos y nosotros íbamos a ser los primeros en saltar. Nos metimos en una avioneta en la que apenas cabíamos los 3 que íbamos a saltar, aparte de los monitores y los cámaras. El vuelo fue muy bonito, teníamos vistas del Mount Cook desde arriba y el glaciar de fondo. El salto fue en tandem, por lo que nosotros no teníamos que preocuparnos de nada, solo disfrutar. La experiencia es indescriptible, de lo mejor que hemos hecho en nuestra vida.  El salto fue de 12.000 pies, la caída libre, que fue lo mejor, duró unos 45 segundos, y después son unos 5 minutos desde que se abre el paracaídas hasta que aterrizamos. Todo ocurre muy deprisa, no da tiempo ni de pensar lo que estas haciendo. Después de Franz Josef fuimos a Fox Glacier, donde hicimos un tour a pié por el hielo, estuvimos unas 6 horas recorriendo el glaciar con un guía, metiéndonos en cuevas de hielo y escalando, fue increíble.

Seguimos recorriendo la costa oeste hacia el sur, y nos empezamos a adentrar hacia el interior. Esta fue nuestra parte preferida de Nueva Zelanda, el tramo hacia Lake Wanaka, donde tienes el lago Wanaka a un lado y el lago Hawea al otro. El paisaje es alucinante, de película, es lo que nos imaginabas antes de llegar a Nueva Zelanda. El color del lago es precioso, es un paisaje de postal. Pasamos un día en Wanaka, un pueblo pequeño y muy bonito al lado del lago.

Al día siguiente fuimos a Queenstown, hay dos rutas para llegar desde Wanaka, nosotros fuimos por la que cruza las montañas, es un poco mas larga pero muy bonita. Valió la pena, desde arriba había unas vistas espectaculares. Queenstown es la ciudad mas turística de la isla sur, aquí hay miles de cosas que hacer, es la capital de la aventura de Nueva Zelanda. Nosotros queríamos hacer un Bungy jump aquí. Llegamos al medio día y fuimos a preguntar por los saltos. Yo quería hacer el salto grande y Susi quería hacer uno diferente. Me dijeron que yo podía saltar ese mismo día y para Susi reservamos para el día siguiente. El salto que iba a hacer yo estaba a las afueras, a media hora de camino. Es un salto de 134 metros, y se salta desde una cabina suspendida entre dos acantilados, a donde se llega con un telecabina. La experiencia fue increíble, pura adrenalina. Fueron 8 segundos de caida libre. Esa noche Susi casi no pudo dormir, ya que sabia que al día siguiente tendría que saltar. Su salto fue desde el Kawarau Bridge, es un salto de 43 metros encima de un río. Estaba muy nerviosa, pero le encanto la experiencia, fueron 3 segundos de caida libre donde incluso tocas el agua al llegar abajo.

El siguiente destino fue Milford Sound, en Fiordland, que son los famosos fiordos de Nueva Zelanda. El camino hasta llegar a los fiordos es increíble, lleno de cataratas y acantilados, un paisaje muy dramático. También para llegar hay que cruzar un túnel que daba algo de miedo, era bastante largo, de un solo sentido y en pendiente. Después hicimos un tour en barco por el fiordo, ahí llueve muy a menudo, y estuvo lloviendo antes de empezar el tour, aunque después paro pero el día estaba bastante nublado. Aun así fue muy bonito, el fiordo es alucinante. También paramos en una plataforma submarina donde hacen estudios marinos y donde pudimos ver coral negro, muy interesante.

Seguimos hacia el sur y llegamos hasta Ivercargill, desde ahí se puede coger el ferry hacia Stewart Island, que es el mejor sitio para ver Kiwis salvajes, pero decidimos no ir, ya que el ferry era bastante caro y ni siquiera tienes la garantía de que vayas a ver uno, ya que son bastante difíciles de ver. De ahí seguimos hasta Dunedin, donde hay una península muy bonita, y es un buen sitio para ver los pingüinos de ojos amarillos, nosotros lo intentamos pero no pudimos ver ninguno, aunque pudimos ver algunos albatroces. Solo pasamos un día ahí y seguimos nuestro camino.

Nos dirigimos al interior hacia el Mount Cook, donde pasamos dos noches. Tuvimos noche de luna llena aquí, fue espectacular. Hicimos dos caminatas con vistas hacia el Mount Cook, que es la montaña mas alta del país, fue muy bonito. También fuimos al centro de Egmund Hillary, es un Neocelandés que fue el primer hombre en escalar el Everest, fue muy interesante, también había un planetario donde vimos algunas proyecciones.

De ahí nos dirigimos a la costa este y seguimos hacia el norte, pasamos por los lagos Tekapo y Pukaki, muy bonitos. Pasamos por Christchurch, donde no quisimos parar ya que aun estaba muy reciente lo del terremoto, justo dos horas después de pasar por ahí hubo otra réplica bastante fuerte. Durante nuestro viaje también nos encontramos con mucha gente que lo había perdido todo a causa del terremoto y tenían miedo de volver a la ciudad.

Seguimos por la costa y llegamos hasta Kaikoura, que es famosa porque aquí se puede nadar con delfines y ver ballenas. Aquí la costa esta llena de animales, es increíble, también vimos muchas focas y albatroces. El primer día fuimos a nadar con delfines, había mas de 400, el agua estaba fría pero te dan un buen traje. Puedes ver los delfines nadando a tu alrededor y debajo de ti, los ves saltar y hacer piruetas justo a tu lado, es impresionante. Al día siguiente Melanie se fue a Christchurch, ya que tenia su vuelo desde ahí, habíamos recorrido las dos islas durante casi 2 meses con ella. Nosotros ese día fuimos a ver ballenas, y vimos dos cachalotes enormes, una pasada. Kaikoura es un lugar increíble lleno de vida, nos encantó. ¡Además encontramos un sitio donde hacen la mejor hamburguesa de Nueva Zelanda!

Después fuimos a Nelson de nuevo, donde empezamos nuestro curso de inglés, que duró 4 semanas. Conocimos a mucha gente de todas las partes del mundo, además los profesores eran todos muy amables y había muy buen ambiente siempre en la escuela. Aprendimos mucho inglés, el curso era intensivo, con 23 horas a la semana. Durante esas 4 semanas descansamos mucho, lo necesitábamos, nos vino bien estar un tiempo en el mismo sitio sin movernos, ya que no habíamos parado en 7 meses. Aunque a veces nos costó un poco despertarnos temprano todas las mañanas y entrar en ritmo de nuevo, además estaba empezando a hacer mucho frío, sobre todo por la noche y por la mañana. Fuimos unas cuantas veces al cine e hicimos una barbacoa con la gente de la escuela en la playa. También tuvimos un día de comida internacional, donde cada alumno trajo algo típico de su país, ¡todo estaba buenísimo! Lo pasamos muy bien en Nelson.

Durante el tiempo que estuvimos haciendo el curso estuvimos planeando un poco el resto de nuestro viaje e hicimos algunos cambios. Primero teníamos pensado pasar 4 meses en Nueva Zelanda, pero era un poco complicado ampliar el visado de Susi, que tenía visado para 3 meses. Así que decidimos no prolongarlo e irnos antes, por lo que teníamos 1 mes de sobra. Cambiamos el vuelo a las Cook Islands, y además con el tiempo extra que teníamos decidimos ir a México, a donde queríamos ir desde el principio pero no era seguro de que pudiéramos ir. Además adelantamos un poco nuestro último vuelo, así que íbamos a estar un poco antes de vuelta y tendíamos un poco mas de tiempo en Hungría con la familia de Susi. Estábamos muy contentos con los cambios y con muchas ganas de seguir con nuestro viaje.

Terminamos nuestro curso el día 22 de abril, era un jueves, era semana santa y por eso no teníamos clase el viernes. Teníamos el ferry para el viernes por la mañana, y el jueves por la tarde después de terminar las clases nos dirigimos hacia Picton, y nos quedamos a dormir por el camino, en la misma rest area donde se desbordo el río cuando llegamos. Cogimos el primer ferry por la mañana y llegamos a Wellington a las 12 del medio día. Nuestra intención era de llegar a Auckland el sábado por la mañana, ya que queríamos vender nuestra furgo y todos los sábados hay un Backpackers car market en la ciudad. Así que hicimos mas de 700 Km. en un día recorriendo casi toda la isla norte de sur a norte. Fue un día muy largo, pero lo conseguimos y llegamos a tiempo. Pero cuando llegamos al mercado vimos que había muchas furgonetas y nadie interesado en comprar, le enseñamos la furgo a una persona en todo el día. Teníamos unos 10 días para vender a Pinkyboy, pusimos el anuncio en Internet y fuimos a todos los backpackers de la ciudad a poner el anuncio. Era un momento difícil para vender, ya que se acercaba el invierno y estaba empezando la temporada baja y mucha gente quería vender sus furgonetas y no había nadie que quería comprar. Los primeros días nos quedamos en un holiday park a las afueras del centro, y nuestros últimos días en Nueva Zelanda los pasamos en casa de Hamish, el mismo couchsurfer donde nos habíamos quedado cuando llegamos, lo pasamos muy bien con el y nos sentimos como en casa.
Cada día que pasaba íbamos bajando el precio de Pinkyboy, ya que se acercaba el día de nuestro vuelo. Le enseñamos la furgo a unas 3 parejas, y al final una pareja se decidió a comprarla. En ese momento teníamos a mas gente interesada, pero ellos hicieron la mejor oferta. Tuvimos que bajar bastante el precio, pero aun así valió la pena comprar la furgo, y fue muchísimo mas barato que si hubiéramos alquilado una. Además no tuvimos ni un solo problema durante todo el viaje e hicimos 10.000 Km. alrededor del país con Pinkyboy durante 3 meses.

En resumen la isla sur de Nueva Zelanda es preciosa, nos gustó mas que la isla norte, tiene paisajes alucinantes y miles de cosas que puedes hacer. Y lo pasamos genial durante el mes que hicimos el curso de ingles en Nelson.

Volamos de Auckland a Rarotonga el día 3 de mayo, justo unas horas antes de volar nos enteramos que hubo un tornado en el centro de Auckland, algo muy inusual y que nunca había ocurrido en la ciudad, parece que las catástrofes siguen persiguiéndonos y una vez mas tuvimos suerte de que no nos pasara nada estando tan cerca.

lunes, 4 de abril de 2011

New Zealand - North Island


New Zealand - North Island

Llegamos a Nueva Zelanda el día 4 de febrero de 2011. Teníamos muchas ganas de llegar ya, sobre todo queríamos salir de Cairns después de todo lo que paso con el ciclón Yasi. Estábamos contentos de estar aquí ya.

Pero antes de salir tuvimos un pequeño problema, Susi solo tenía visado para permanecer en Nueva Zelanda por 3 meses, y nuestro siguiente vuelo era dentro de 4 meses. Nuestra idea era la de extender el visado una vez llegáramos al país, pero en el aeropuerto no nos dejaron volar así y tuvimos que cambiar el siguiente vuelo. Habíamos llegado al aeropuerto con bastante tiempo de sobre y nos dio tiempo de cambiarlo y pudimos coger nuestro avión.

Llegamos al aeropuerto de Auckland, desde donde nos recogió Hamish, el couchsurfer donde nos quedamos durante 1 semana en la ciudad.

Durante el tiempo que estuvimos aquí organizamos nuestro viaje, y empezamos a mirar furgonetas. Al principio teníamos pensado alquilar, pero al final decidimos comprar una furgo. El segundo día Hamish nos llevo a ver la ciudad, y fue con nosotros a un mercado de coches. Nos ayudo muchísimo y paso dos horas con nosotros mirando furgonetas.

Después de unos días encontramos nuestra furgo, vimos un anuncio por Internet, y desde que la vimos nos encantó. Además daba la casualidad de que el dueño le había puesto el nombre de Pinky Boy, ya sabíamos que era la nuestra. Es una Mitsubishi L300 Cyclone del 89. El nombre del modelo nos recordó al ciclón en Cairns J. Se la compramos a un francés que estuvo un año aquí, y también nos dio buenos consejos de a donde ir.

En casa de Hamish conocimos a mucha gente, unos pocos días después de nosotros llegó Melanie, una mujer inglesa, que también se compró un coche y decidimos empezar juntos nuestro viaje.

Después de una semana estábamos listos para salir, teníamos la furgo preparada, los papeles y el seguro estaban listos. Decidimos empezar nuestra ruta hacia el norte, y nos pusimos de camino.
Subimos por la costa este, pasamos por algunas playas bonitas y nuestra primera parada fueron unas cuevas, no había visitas guiadas y podías entrar por tu cuenta, habían varias cuevas pero algunas estaban inundadas y solo entramos en una. Pudimos ver los Gloworms, unos pequeños insectos que viven dentro y que brillan en la oscuridad.

El tercer día paramos en Tutukaka, desde donde hicimos un tour hacia las Poor Knight Islands, unas islas pequeñas a una hora de la costa. En una de las islas está la cueva marina mas grande del mundo, primero hicimos snorkling y pudimos nadar dentro de la cueva, ya que no estaba sumergida del todo. El agua era muy profunda y dentro de la cueva estaba muy oscuro, pero estaba lleno de vida por todas partes y pudimos ver muchos peces. El agua estaba muy fría, pero aguantamos un buen rato dentro del agua.
Mas tarde cogimos un kayak, con el que también entramos en la cueva y dimos una vuelta por la isla. Fue divertido. Por la tarde cuando íbamos de vuelta a la costa vimos delfines, normalmente nos dijeron que no tienen permiso para dejar a la gente nadar con ellos, pero ese día el dueño del barco estaba a bordo y dijo que nos podíamos tirar al agua. Así que todos entramos en el agua, aunque en ese momento los delfines se habían alejado y no los vimos de cerca, al menos lo intentamos. El día estuvo genial, las islas son preciosas y son un paraíso para el submarinismo. Por la tarde seguimos hacia el norte, pero se nos hizo tarde y estaba empezando a anochecer y aun no habíamos encontrado un sitio donde pasar la noche. Estábamos en un pueblo donde paramos en un Mcdonalds para comer algo, y al final pasamos la noche ahí mismo en el parking, al lado del Mcdrive, no estuvo mal, fue divertido.

Al día siguiente pasamos por la 90 mile beach, una playa por la que se puede conducir, nos recordó un poco a Fraser Island. Solo pasamos por ahí y seguimos hacia el norte, donde llegamos a Cape Reinga, el punto mas al norte de Nueva Zelanda. El paisaje era precioso, además es el punto donde se cruzan el mar de Tasmania y el océano Pacífico, es increíble, se puede ver la línea donde las dos corrientes chocan.
Antes de llegar ahí Melanie estaba teniendo problemas con su coche, se le estaba calentando, y ella volvió al pueblo mas cercano para comprar agua, nosotros llegamos primero a Cape Reinga, después llego ella acompañada de Kyle, un autostopista que se había encontrado por el camino. Recorrimos el sitio juntos y por la tarde nos pusimos de camino hacia el sur de vuelta a Auckland. Esa tarde acampamos todos juntos, encontramos un sitio increíble en el bosque al lado de un río.

Al día siguiente seguimos los 4 juntos, de camino paramos para ver el árbol mas viejo de Nueva Zelanda, era enorme. Pero cuando volvimos al parking vimos que el coche de Melanie estaba perdiendo agua, y seguía con problemas. Intentamos llegar al siguiente pueblo, y vimos un taller por el camino. Paramos y el mecánico empezó a mirar el coche, al principio pensamos que no era nada grave, aunque después de hacer una prueba de compresión nos dijo que el motor estaba jodido. La reparación hubiera sido demasiado cara para lo que valía el coche, el mecánico le ofreció dinero por el coche para desguace y aceptó. Nunca nos fiamos del todo del mecánico, pero ella no tenia otra alternativa, estábamos en medio de la nada y el coche no iba mas de 1 kilómetro sin calentarse. Kyle siguió su camino solo y nosotros seguimos juntos con Melanie en nuestra furgo. Esa noche llegamos a Auckland, donde fuimos a la casa de Hamish.

Nosotros teníamos el plan de ir a un festival de haka, que es un baile tradicional maorí, el mismo que hacen los All Blacks antes de un partido. Era en Gisborne ese fin de semana, y por eso queríamos seguir cuanto antes. Melanie no sabia que hacer, ya que no tenia coche y estaba pensando en comprarse otro. Había una pareja de españoles quedándose con Hamish al mismo tiempo, y estaban vendiendo su coche, pero al final decidió no comprarlo. Nosotros le ofrecimos que podía venir con nosotros a Gisborne para el festival, y que después podía decidir como seguir su viaje. Al final seguimos el viaje los tres juntos.

Salimos el día siguiente, era viernes, y habíamos comprado las entradas para el domingo. Esa noche llegamos a un pequeño pueblo, que tenia un parking donde estaba permitido pasar la noche, y nos quedamos ahí. Al día siguiente dimos un paseo por el pueblo, estaba lleno de tiendas de antigüedades, y todo tenia un estilo retro, muy curioso. Además daba la casualidad de que ese fin de semana había otro festival en ese pueblo. Ese día por la mañana había un desfile de coches antiguos, y nos quedamos para verlo, fue increíble. Además nos enteramos que para el día siguiente había una carrera de motos por las calles de la ciudad, teníamos muchas ganas de quedarnos, pero ya teníamos las entradas para el otro festival. Por la tarde seguimos, y esa noche nos volvimos a quedar en un lugar precioso, en medio de las montañas.

Finalmente llegamos a Gisborne el domingo por la mañana, estaba lloviendo pero teníamos muchas ganas de ver el festival. Es una competición nacional de haka que se celebra sólo cada dos años, teníamos suerte de poder ir. Ahí se puede ver la mejor haka del mundo. Ese día era la final, pero cuando llegamos nos dijeron que ya habían actuado algunos grupos y pensamos que nos lo habíamos perdido, pero llegamos a tiempo de ver a los mejores. Además ese día estaba planeado batir el record mundial de haka, donde todo el público tenia que participar y bailar, nos dieron unas lecciones y bailamos la haka, y además batimos el record, por lo que estaremos en el próximo libro guiness por haber bailado la haka mas numerosa del mundo J.
Pudimos ver el grupo que había ganado la edición anterior, y daba la casualidad de que conocíamos a algunos integrantes del grupo, porque los habíamos visto bailar en la Expo de Shanghai unos meses antes, los vimos actuar en el pabellón de Nueva Zelanda. Fue muy curioso, seguramente los habían mandado a ellos por ser los ganadores anteriores. Aun no sabemos quienes ganaron la competición, porque nos fuimos antes de la entrega de premios, pero para nosotros ellos fueron los mejores.
El festival nos encantó, lo malo fue que estuvo todo el día lloviendo, estuvimos bajo la lluvia durante horas, teníamos chaquetas impermeables, pero no sirvió de nada, no habíamos llevado ningún paraguas y al final estábamos completamente mojados. Toda nuestra ropa estaba empapada, además nos habíamos llevado las mochilas con todas nuestras cosas importantes, ya que es mas seguro que dejarlo en la furgo, y casi todo estaba mojado, el portátil, la cartera, los discos duros, papeles, incluso el pasaporte. Decidimos coger una habitación por la tarde, ya que necesitábamos un sitio donde poder secar todo. No tuvimos ningún problema con el portátil y demás, todo funcionaba, y pudimos secar todos los papeles. Pero seguro que nunca vamos a olvidar la experiencia.

Después de Gisborne seguimos nuestro viaje juntos con Melanie, nos pusimos de camino y empezamos recorriendo la costa este. El paisaje era bonito, recorrimos la costa pasando por playas y acantilados. Pasamos la noche en una playa donde conocimos a dos holandeses, eran hermanos y al principio nos parecieron simpáticos. Nos enseñaron sus videos de cuando hicieron skydiving y nos pasamos algunas películas, pero después de un rato nos estaban empezando a caer algo pesados, no nos dejaron tranquilos y hacían miles de preguntas, parecía que hacia mucho tiempo que no hablaban con nadie. La playa estaba llena de sandflies, ya habíamos visto algunas antes, pero no tantas, son parecidas a los mosquitos, pero la picadura es peor, dura mucho mas tiempo y están por todas partes. Al día siguiente seguimos por la costa, desde donde pudimos ver White Island, una pequeña isla con un volcán activo, pudimos ver el humo que salía del volcán. En ese momento los holandeses nos estaban siguiendo con su furgoneta y haciendo las mismas paradas que nosotros, pensamos que nos iban a estar siguiendo todo el día, aunque al final siguieron de largo cuando paramos. Ese día llegamos a Rotorua, donde queríamos hacer rafting, fuimos al centro de información donde nos encontramos a los holandeses de nuevo, que casualidad. Reservamos el rafting para el día siguiente y pasamos la noche a las afueras de la ciudad. Todo olía a sulfuro, ya que Rotorua es famosa también por sus baños termales. Pero la ciudad entera apestaba. Esa tarde fue cuando nos enteramos del terremoto que había ocurrido en Christchurch, no habíamos visto las noticias ni teníamos acceso a Internet, nos enteramos porque nuestra familia y amigos empezaron a preocuparse por nosotros y nos llamaron para ver como estábamos, ellos se habían enterado mucho antes que nosotros. Mas adelante empezamos a escuchar noticias y nos dimos cuenta de lo grave que había sido.

Al día siguiente hicimos el rafting, la experiencia nos encantó, lo mejor fue una catarata de 7 metros que bajamos. Nunca habíamos hecho rafting antes y fue genial. Por la tarde seguimos hacia Matamata, donde se encuentra Hobbiton, que es el único decorado exterior que se conserva de los rodajes de la película El Señor de los Anillos, los demás se destruyeron por temas de copyright. Susi no había visto las películas entonces, y no le pareció muy interesante porque no sabia de que iba la historia, ya que el guía iba explicando lo que había pasado en cada lugar. A mi me gustó mucho, todo estaba muy bien conservado y parecía que estaba dentro de la película. Al final del tour también hay una demostración de cómo pelan a una oveja y te dejan darle el biberón a unos corderos.

Esa tarde seguimos hacia las Cuevas de Waitomo, pasamos la noche en un área de conservación a las afueras de un pueblo, cerca de las cuevas. Al día siguiente reservamos nuestro tour de black water rafting. No tiene nada que ver con rafting, solo el nombre, primero hicimos un descenso de 27 metros con arnés y después recorrimos las cuevas durante unas horas, fue increíble, las cuevas estaban llenas de Gloworms, que ya habíamos visto antes. Había partes con mas de un metro de agua, y algunas partes las recorrimos en unos donuts que nos dieron, fue muy divertido. Aparte de los Gloworms había mas vida dentro, vimos arañas e incluso una anguila de mas de un metro. La ultima parte fue una escalada para volver a la superficie, lo pasamos genial. Pasamos la noche en el mismo sitio y continuamos al día siguiente.

Nuestra siguiente parada fue Taupo, donde solo pasamos unas horas, fuimos a ver unas cataratas que habían cerca de la ciudad. Eran bastante grandes y dijimos de broma que podía ser un buen sitio para hacer rafting, ya que pensábamos que era imposible hacerlo. A los pocos minutos vimos a un hombre en un kayak bajar por las cataratas, nos quedamos sin palabras.
En la ciudad solo pasamos por el centro de información y preguntamos por el Tongariro national park, que era nuestro siguiente plan. Nos dirigimos ahí y pasamos la noche por el camino, en medio del bosque. Nos despertamos muy temprano y fuimos al parque nacional. Queríamos hacer el Tongariro alpine crossing, que es una caminata de 19 kilómetros. Dejamos la furgo en un parking, de ahí hay un transporte que te lleva al principio del camino y te recoge al final. Tardamos entre 6 y 7 horas, tuvimos suerte con el tiempo, aunque estuvo un poco nublado y cayeron unas gotas al final del recorrido. El paisaje era volcánico y había unos lagos impresionantes. También vimos el volcán que es el monte del destino en el señor de los anillos. Acabamos cansados pero valió la pena.

Al día siguiente fuimos a la costa oeste, donde llegamos hasta el monte Taranaki, un volcán impresionante de 2500 metros de altura. Dimos una vuelta completa alrededor y seguimos hacia el sur. Era domingo y teníamos nuestro billete de ferry para ir a la isla sur para el martes. Nos pusimos de camino y pasamos la noche en un área de descanso y al día siguiente llegamos casi a Wellington, desde donde salía el ferry.

Pasamos casi 4 semanas en la isla norte, y vimos mucho de la isla, la recorrimos casi entera. Tiene paisajes bonitos y siempre encontramos lugares increíbles donde acampar y pasar la noche. Tuvimos muchas aventuras, hicimos muchos kilómetros y lo pasamos bien, pero teníamos ganas de llegar ya a la isla sur, porque todo el mundo nos había dicho que es mucho mas bonita e impresionante que la isla norte.


Australia - Resumen

Australia

Una etapa de nuestro viaje llegó a su fin. Desde el principio nuestra vuelta al mundo estaba basada en Australia, fue el país en el que mas tiempo íbamos a estar.
Estuvimos aquí desde el 14 de octubre de 2010 hasta el 4 de febrero de 2011.
Fueron mas de 3 meses y medio llenos de aventuras y experiencias increíbles que nunca vamos a olvidar.

Recorrimos el país entero, en total hicimos mas de 20.000 kms por carretera y muchos kilómetros a pie también. Estuvimos en los 8 estados y en las 8 capitales. Cruzamos 3 veces el trópico de capricornio. Empezamos en Perth y recorrimos toda la costa oeste pasando por Broome hacia el norte hasta Darwin, desde ahí cruzamos el remoto centro del país de norte a sur pasando por Alice Springs y Ayers Rock llegando a Adelaide, desde donde recorrimos la costa sur por la Great Ocean Road hasta Melbourne. Desde ahí cruzamos en ferry hasta Tasmania, desde donde volvimos a Melbourne y recorrimos toda la costa este del país pasando por Canberra y Sydney hasta Cairns. Nuestra ruta fue como una S.
Australia es un país enorme lleno de contrastes, en el tiempo que estuvimos aquí pasamos días de calor insoportable en el norte y otros de mucho frío en el sur, tuvimos lluvia e inundaciones, pasamos por incendios forestales y como despedida estuvimos en Cairns cuando golpeó el ciclón Yasi, que fue el peor de su historia.
Pasamos por desiertos inmensos y por selvas tropicales, vimos todo tipo de vida salvaje.
Estuvimos en fin de año en Sydney y celebramos el Australia day en Cairns.

Aprendimos mucho sobre el país, y sobre la gente aborigen de Australia, de la que nos encantó su cultura y su arte. La gente es muy amable y siempre nos sentimos bienvenidos.

Ahora nos damos cuenta de que comprar la furgoneta fue lo mejor que hicimos, es la mejor forma de recorrer el país, fue una aventura increíble conducir aquí y nunca tuvimos ni un solo problema. El país esta muy bien preparado para esta forma de viajar, es el paraíso para backpackers.

De Australia nos vamos con el mejor recuerdo posible, con ganas de volver algún día. Fue simplemente perfecto.

Ahora comienza una nueva etapa de nuestro viaje, nuestro próximo destino es Nueva Zelanda.








lunes, 28 de febrero de 2011

Australia - Queensland


Australia - Queensland

Llegamos a Queensland el día 11 de enero, el ultimo estado que nos quedaba, ya habíamos estado en los 8 estados del país. Nuestra aventura por Australia llegaba a su fin, aunque aun tuvimos muchas buenas experiencias aquí.

Unos días antes cuando aun estábamos en NSW empezamos a oír acerca de las inundaciones mas al norte, aunque aun no le dimos mucha importancia ya que nunca veíamos las noticias y no sabíamos casi nada.

Nuestro primer destino fue la Gold Coast, aunque pasamos por aquí muy rápido, ya que no teníamos muchas ganas de pasar mucho tiempo aquí. El primer día paramos primero en Kirra Beach un rato y después seguimos un poco al norte y pasamos por Surfers Paradise, donde pasamos la mayor parte del día. Ese mismo día por la noche llegamos a Helensvale, a las afueras de la ciudad. Nuestra intención era de pasar  1 día o dos ahí e ir al Wet’n Wild, un parque acuático enorme. Por la zona hay muchos parques de atracciones, pero no teníamos muchas ganas de ir a todos y solo queríamos ir al parque acuático.
Ahí es donde empezamos a ver las noticias, ya que donde nos quedamos había tele, y empezamos a escuchar todo acerca de las inundaciones, y fue justo unos días antes de que llegaran a Brisbane. Las noticias no hablaban de otra cosa, que se esperaban las mayores inundaciones de la historia en la ciudad, y estaba solo a unos 60 km al norte de donde estábamos. En ese momento no sabíamos que hacer, ya que teníamos que pasar por ahí si queríamos seguir hacia el norte. Al final esperamos unos días a ver que pasaba.
Un día lo pasamos en el parque acuático, que a pesar de todo estaba abarrotado de gente. Y lo pasamos genial, aunque a veces había colas de mas de una hora para algunas atracciones. Lo mejor fueron unos toboganes con loop que habían, muy radical, primero entras en una cabina donde después de una cuenta atrás hay una trampilla en el suelo que se abre, y empiezas casi en caída libre.

Aun seguíamos sin saber que hacer, y no sabíamos si podíamos seguir hacia el norte, la autopista estaba al lado de donde nos quedábamos y había mucho tráfico en ambas direcciones, y decidimos continuar. Al día siguiente salimos, y a  pocos kilómetros de la ciudad se nos rompió una correa del motor, y tuvimos tanta suerte que nada mas coger la primera salida de la autopista que había vimos 3 talleres mecánicos uno al lado del otro. En el segundo que preguntamos nos dijeron que nos lo podían arreglar al momento. Esperamos unas horas y nos pusieron correas nuevas, estábamos listos para continuar.
Cuando llegamos a Brisbane había algo de atasco. Pasamos por el puente que cruza el rió, y vimos que estaba algo subido el nivel del agua y alguna carretera estaba cortada, pero en el centro la vida seguía con normalidad, y si no es por las noticias no nos hubiéramos enterado de que estaba pasando algo ahí.

Pasamos la noche un poco al interior en las montañas, y al día siguiente fuimos al Australia Zoo, el zoo de Steve Irwin, el famoso cazador de cocodrilos. La verdad es que no queríamos pagar para ir a ningún zoo, ya que habíamos visto todos los animales que queríamos ver en estado salvaje, aunque teníamos ganas de ver los shows de cocodrilos, que nos habían dicho que son muy buenos. Pudimos dar de comer a elefantes, y vimos un show con tortugas, aunque aparte de eso el zoo no tenia nada en especial. Vimos el espectáculo de cocodrilos, que empieza con la hija de Steve Irwin haciendo un número musical. Toda la familia participa en el show, su mujer e incluso su hijo pequeño, lo que nos impresionó mucho. El show esta muy bien, nos gustó mucho. Aunque al final pensamos que es muy caro el precio de la entrada para lo que es el zoo.

Esa misma tarde llegamos a Harvey Bay, desde donde sale el barco para Fraser Island. Nos quedamos en el mismo parque de caravanas donde me había quedado yo dos años antes, aunque había cambiado de dueños pero seguía siendo muy tranquilo y barato. Nada mas llegar nos ayudaron a buscar un tour para el día siguiente. No teníamos ganas de hacer un tour de mas de un día, ya que no sabíamos como iban a seguir las inundaciones y no queríamos pasar mucho tiempo ahí. Al final pasamos un día en Fraser Island, que es la isla de arena mas grande del mundo. No hay carreteras, y se conduce en la arena por la costa. La isla tiene mucha vegetación y algunos lagos, lo que es increíble al ser el suelo todo arena. Pasamos por varios sitios en la isla y en nuestra ultima parada fuimos a bañarnos a un lago alucinante. Al final pensamos que fue suficiente pasar solo un día ahí y fue increíble.

Al día siguiente seguimos hacia el norte, y pasamos por Agnes Water, curiosamente la madre y la hermana de Susi se llaman Agnes. Y también fuimos a 1770, otro pueblo que esta al lado. Pasamos un rato ahí, son pueblos muy tranquilos y desde aquí ya se pueden hacer tours a la great barrier reef., aunque nosotros queríamos ir desde mas al norte. Esa tarde seguimos y pasamos por Rockhampton, que es el único sitio donde vimos lo que habían hecho las inundaciones. Aquí es donde fueron las primeras y las peores, cuando pasamos por aquí habían pasado 2 semanas desde las inundaciones, y la ciudad todavía estaba rodeada de agua, en el centro se podía ver la basura aun amontonada de lo que había sido destruido. Además toda la ciudad apestaba por la humedad y aun tenían problemas para recibir productos en los supermercados y restaurantes.

El día 18 de enero llegamos a Airlie Beach, donde pasamos unos días. Es un pueblo pequeño y muy turístico. Nos encanto, y lo pasamos muy bien aquí, había muy buen ambiente.
Al día siguiente de llegar fuimos a las Whitsunday Islands, que es por lo que habíamos parado aquí y teniamos muchas ganas de ver las islas. Fue un día genial, hicimos snorkling y caminamos un poco por la isla mas grande. Las islas son un paraíso de aguas cristalinas, incluso se podían ver las mantas y otros peces desde un mirador en la isla. Almorzamos en la playa y volvimos a Airlie Beach por la tarde. Durante el tour conocimos a unos españoles con los que quedamos por la noche y pasamos un buen rato. Fue un día genial.

Seguimos hacia el norte y pasamos por Townsville, desde donde se puede ir a Magnetic Island, aunque no teniamos ganas de ir y solo vimos la isla desde la ciudad. Ese mismo dia continuamos nuestro camino.

El día 22 de enero llegamos a Cairns, nuestra ultima parada en Australia, desde aquí salía nuestro siguiente vuelo. Nada mas llegar pusimos a Pinky a la venta, pusimos anuncios en los hostales y también en internet. Queríamos ir a la Barrier Reef, pero tuvimos que esperar unos días ya que no hacia buen tiempo. Finalmente el tiempo mejoró e hicimos un tour, no era necesario tener el titulo para poder hacer submarinismo, ya que podíamos hacer una inmersión para principiantes. Fue una inmersión de 10 minutos y fue una experiencia increíble, el coral esta lleno de vida y color. Durante el día paramos en dos sitios distintos con el barco donde pudimos hacer snorkling y una inmersión. Incluso pudimos ver una tortuga, nadamos con ella y pudimos tocarla. Fue un día increíble.
Por la mañana nos había escrito una pareja que quería ver la furgo, y por la tarde cuando volvimos quedamos con ellos y se la enseñamos. Les gustó mucho y ese mismo día se decidieron para comprarla. Aunque el día siguiente era festivo y aun tuvimos que esperar otro día para arreglar todo. El día festivo era el Australia Day, y había conciertos y barbacoa en la avenida de la ciudad durante todo el día, nosotros nos quedamos hasta por la tarde en el centro.
Al principio estábamos preocupados de si podíamos vender a Pinky, porque sabíamos que íbamos a estar en Cairns en época de lluvias, que aunque es verano ahí es temporada baja, además es época de ciclones y había pasado todo lo de las inundaciones. Y Cairns no es una ciudad muy grande tampoco. Pero al final todo salio bien y vendimos a Pinky muy rápido, además se la vendimos a una pareja muy amable con la que pasamos unos días en la ciudad, quedamos para cenar e hicimos barbacoa donde comimos carne de canguro, que estaba muy buena por cierto. Lo pasamos muy bien con ellos y nos alegramos de venderle la furgo a ellos, ya que Pinky ya era parte de nuestro viaje, fue nuestra casa durante mas de 3 meses y tenemos muchos buenos recuerdos con ella. Además nunca nos falló durante los mas de 20.000km que hicimos con ella. Al final estuvimos muy tristes por tener que vender a Pinky.
Aunque después de venderla ya estábamos mas tranquilos, incluso cambiamos el vuelo para irnos una semana antes, ya que nos sobraba mucho tiempo. Decidimos ir otra vez a la Barrier Reef e hicimos otro tour. Esta vez fuimos desde Port Douglas, era mas caro que el anterior que hicimos pero valió la pena. También hicimos una inmersión, pero esta vez de 30 minutos. Con este barco paramos en 3 sitios distintos e hicimos snorkling durante todo el día, lo mejor fue cuando vimos un tiburón de arrecife, era pequeño, de algo mas de 1 metro, me pude acercar bastante a el y saqué buenas fotos. Susi se asusto mucho, pero yo ya tenia ganas de ver un tiburón ya que nos habían dicho que se veían bastantes por la zona.

Durante los meses de verano es la época de los ciclones al norte de Australia, y mientras estábamos en Cairns hubo uno pequeño al sur, y después de hacer el tour empezamos a escuchar sobre uno mas grande que venia detrás. Habíamos cambiado nuestro vuelo y lo teníamos para el día 2 de febrero. Durante los próximos días íbamos sabiendo mas acerca de ciclón, que le pusieron el nombre de Yasi. Finalmente se sabia unos días antes que el ciclón iba a llegar a la costa el día 2 por la noche, y pensamos que íbamos a poder volar, ya que nuestro vuelo salía por la mañana. El ciclón era enorme, y ya era de categoría 4. Llamamos a nuestra aerolínea y nos dijeron que nuestro vuelo aun no estaba cancelado, nosotros sabíamos por las noticias que el aeropuerto iba a cerrar, pero no sabían cuando, y aun teníamos la esperanza de poder coger nuestro vuelo. Pero la noche del día 1 se empezaron a cancelar vuelos, y anunciaron que el aeropuerto iba a cerrar a partir de las 10 de la mañana, por lo que cancelaron nuestro vuelo. En ese momento la predicción era que el epicentro del ciclón iba a golpear Cairns directamente con vientos de mas de 280 km/h. Y la ciudad iba a ser evacuada, también nos dijeron que nos íbamos a quedar sin electricidad ni cobertura por días o incluso semanas. Esa noche no dormimos nada y hablamos con la gente del hostal donde estábamos para ver a donde íbamos, y a las 6 de la mañana fuimos todos juntos a un centro de evacuación, era en un centro comercial. Estábamos muy asustados, pero nos sentimos seguros ahí.
El centro estaba lleno de gente y nos dieron mantas y comida, estaba todo muy bien organizado, también nos iban dando información de cómo iba el ciclón y de cuando iba a llegar. En ese momento Yasi ya era de categoría 5, con vientos de mas de 300 km/h, la categoría mas fuerte posible, de la misma fuerza que el ciclón Katrina que golpeó New Orleáns.
 Durante el día el epicentro del ciclón se fue desviando hacia el sur, y al final no nos golpeo directamente. Llegó a la costa sobre las 11 de la noche, y pudimos escuchar el viento durante horas, no dormimos casi nada esa noche, pero nos sentimos seguros en el sitio donde estábamos. Por la mañana todo había pasado y abrieron las puertas. Pudimos salir del centro, cogimos unos carros de la compra donde pusimos todas nuestras mochilas y nos pusimos de camino al hostal donde nos  estábamos quedando, nos quedaba un poco lejos y al final conseguimos coger un taxi. Pudimos ver muchos árboles y plantas destrozados, y muchos carteles que había arrancado el viento.
Por la tarde volvió la electricidad y no había muchos destrozos en la ciudad, pero lo peor fue mas al sur, donde el viento destruyó pueblos enteros, aunque afortunadamente no hubo ninguna victima mortal. Después supimos que los vientos superaron los 290 km/h y que fue el ciclón mas grande de la historia de Australia.
Ese día estábamos muy cansados y dormimos casi todo el día, habían cambiado nuestro vuelo para el día siguiente, el día 4, y ese mismo día escuchamos que el aeropuerto no había sufrido daños y que esa misma tarde ya iban a reabrirlo, por lo que estábamos muy contentos. Finalmente el día 4 de febrero pudimos coger nuestro vuelo.

Aquí terminaba nuestra aventura australiana. En Queensland pasaron muchas cosas mientras estuvimos ahí, tuvieron las inundaciones y el ciclón mas grandes de su historia, pero eso no nos impidió poder disfrutar de esta parte del país, hicimos muchas cosas mientras estuvimos aquí y fue increíble, fue un buen final para nuestro paso por Australia y tuvimos experiencias que nunca olvidaremos,  y además tan distintas como bucear en la great barrier reef o pasar la noche en un centro de evacuación.

domingo, 6 de febrero de 2011

Australia - NSW and ACT


AUSTRALIA

NEW SOUTH WALES AND AUSTRALIAN CAPITAL TERRITORY

Estuvimos en NSW desde el 19 de diciembre hasta el 11 de enero de 2011.

Ahora nuestra aventura iba a continuar por la costa este, por donde íbamos a volver a cruzar el país de sur a norte.

El primer día recorrimos un poco la costa, pasando por muchos pueblos costeros, algunos turísticos y otros no tanto. Paramos en algunas playas, todas preciosas, llenas de pelícanos. El agua aquí aun estaba fresca, pero teníamos buen tiempo.

Pasamos la noche en la costa y a la mañana siguiente salimos hacia el interior, nos dirigíamos al Australian Capital Territory. Llegamos por la tarde a un área de descanso cerca de la ciudad donde pasamos la noche. Al día siguiente nos despertamos temprano y fuimos a Canberra, la capital del país. Pasamos la mañana ahí, es una ciudad pequeña, muy limpia y muy organizada. Fue construida específicamente para ser la capital de Australia a causa de las disputas entre Sydney y Melbourne. Esta muy bien diseñada, con grandes espacios abiertos y es muy fácil conducir en el centro. Aunque todo parecía demasiado artificial, demasiado organizado todo. Visitamos el parlamento y dimos unas vueltas por el centro. Unas horas fueron suficientes y después salimos de la ciudad un poco hacia el sur. Vimos un space centre y decidimos entrar. Fue muy interesante, la entrada era gratuita y había un museo espacial con muchas cosas curiosas, como una piedra lunar y trajes espaciales originales usados por astronautas. Tenían unas antenas de comunicación enormes, la mas grande media 70 metros de alto. Nos gustó mucho la visita.
Por la tarde entramos en una reserva natural, donde hicimos picnic y pasamos la tarde. Pudimos ver algunos platypus, emus y muchos canguros. Nos pudimos acercar mucho a unos canguros salvajes, uno se acercó muy rápido a Susi y se asustó mucho, son animales inofensivos pero también son grandes y fuertes. Pegó un buen grito aunque yo creo que el canguro se asustó mas que ella.
Solo pasamos un día completo en el ACT, esa tarde salimos y nos dirigimos de nuevo hacia la costa, nos paramos a dormir a medio camino y seguimos a la mañana siguiente.

Seguimos recorriendo la costa sur de NSW, donde casi todos los pueblos costeros son muy turísticos. Habíamos decidido pasar la navidad en las Blue Mountains, no queríamos quedarnos en la costa, y nos dirigimos ahí.

Estuvimos en las Blue Mountains desde el 23 hasta el 26 de diciembre. Fueron unas navidades tranquilas, tuvimos mucha lluvia aunque aprovechamos cuando hacia buen tiempo para visitar el parque nacional. Fuimos a las three sisters, el icono mas famoso de las montañas e hicimos algunas caminatas por los acantilados, donde habían algunas cataratas increíbles y unos paisajes alucinantes. El día de navidad no hicimos gran cosa, nos hicimos una cena para los dos y todo fue muy tranquilo. Conocimos una pareja en el parque de caravanas donde nos quedamos, eran muy amables y hablamos mucho con ellos. Nos invitaron a que fuéramos a su casa que tenían mas al norte, aunque ellos iban a seguir de viaje, pero su hijo nos podía recibir en la casa.

El día 28 de diciembre llegamos a Sydney, lo conseguimos, era nuestro objetivo, llegar ahí antes de fin de año. Fuimos a Maroubra Beach, que es donde nos quedamos la semana que estuvimos ahí. Ahí nos estaban esperando Deborah e Ivan, y dejamos la furgo en un parking delante de su casa, que es donde nos quedamos todo el tiempo. Ese mismo día fuimos todos a Bondi de barbacoa, donde quedamos con sus amigos y pasamos un buen rato.
Los días siguientes fuimos de visita a la ciudad, que para nosotros es la ciudad mas bonita en la que estuvimos en Australia.
Y finalmente llegó el día 31, estábamos impacientes y con muchas ganas de ver los fuegos artificiales. Decidimos verlos desde los botanical garden, uno de los mejores sitios para verlo, con unas vistas increíbles de la opera house con el harbour bridge justo detrás. Pero solo tenia capacidad para 20.000 personas y había que ir temprano para coger sitio. Llegamos para hacer cola a las 8 de la mañana, y ya había mucha gente. Las puertas habrían a las 10 y entramos sobre las 12. Nada mas entrar cogimos un sitio increíble, con nadie delante de nosotros. El día fue muy largo, hacia mucho calor y el sol estaba fuertísimo. Aunque fuimos preparados e hicimos picnic ahí. Por la tarde hubo un show aéreo y las horas se pasaron rápido. A las 9 había unos fuegos artificiales, mas pequeños que los principales llamados family fireworks. Pensados para las familias y los niños, que no aguantas hasta las 12 de la noche. Fueron muy bonitos pero lo mejor estaba por llegar. Y finalmente pudimos ver el espectáculo que tanto esperábamos. Fue una pasada, los fuegos mas bonitos que hemos visto en nuestra vida, sencillamente increíble. Duro unos 12 minutos, y valió la pena madrugar y esperar todo el día al sol, es una experiencia que nunca olvidaremos.
Después de los fuegos habíamos quedado con Deborah e Ivan en Bondi. Tuvimos suerte y pudimos coger una guagua rápido, había un concierto de David Guetta, que aunque no pudimos entrar lo pudimos escuchar perfectamente desde la playa. Estuvimos un rato por ahí y había muy buen ambiente. No pudimos localizar a nadie ya que los móviles no iban y había muchísima gente, y nosotros estábamos muy cansados porque el día había sido muy largo. Decidimos irnos pero era imposible encontrar una guagua o un taxi, había demasiada gente, así que decidimos volver caminando. Nuestra furgo estaba a unos 10 km. y tardamos mas de 3 horas en llegar. Llegamos justo cuando estaba saliendo el sol, fue muy bonito, lo que pasa es que cuando el sol da en la furgo hace un calor insoportable, y solo pudimos dormir unas pocas horas. Fue duro pero valió la pena pasar el fin de año en Sydney. Entre que en los botanical garden no se podía llevar alcohol y después no estuvimos mucho tiempo en Bondi no bebimos ni una copa en toda la noche, un poco raro para un fin de año pero no nos importó, no lo podíamos haber pasado mejor.
Nos quedamos 2 días mas para descansar y después seguimos hacia el norte. Lo pasamos genial en Sydney con Deborah e Ivan. Es una de las ciudades que mas nos gustaron aquí.

Fuimos a la casa de la familia que conocimos en las Blue Mountains, fueron muy amables y nos quedamos 3 días con ellos. Aparcamos la furgo en su garaje y dormimos ahí. Tienen una casa increíble y en un lugar muy tranquilo, con un jardín enorme y hasta tenían 2 caballos. Nos encantó quedarnos con ellos y nos ayudaron muchísimo, son muy buena gente, apenas nos conocían y nos dejaron usar su casa como si fuera nuestra.
Los días que estuvimos ahí visitamos un lago que estaba cerca, intentamos pescar en Wangi Wangi aunque no cogimos nada, pero pudimos dar de comer a los pelícanos.
También fuimos hacia el interior donde pasamos por Kulnura, un pequeño pueblo en el que ya había estado en 2008 cuando vine a Australia.

Los próximos días seguimos nuestro camino hacia el norte, pasamos por South West Rocks, Coffs Harbour, Byron Bay, son pueblos costeros muy turísticos y con playas bonitas. No pasamos demasiado tiempo por ahí y seguimos nuestro viaje hacia Queensland.

Lo pasamos muy bien en NSW, aunque mientras subíamos la costa todo era cada vez mas turístico y todo estaba mas masificado y de alguna manera menos auténtico. Había mucha menos vida salvaje y menos espacios abiertos. Aun así fue genial, pasar el fin de año en Sydney fue lo mejor y también fue muy bonito pasar la navidad en las Blue Mountains. De nuevo tuvimos muchas experiencias positivas y nos vamos de aquí con un buen recuerdo.

La próxima entrega será sobre nuestro paso por Queensland.